'Mal-me-quer'

 

La pintura de Rita Ferreira extrae elementos efímeros y viejos recuerdos de su archivo personal, transformándolos en representaciones visuales cuya legibilidad a menudo se excluye y difiere. La singularidad del óleo sobre papel yuxtapuesto al rechazo del marco tradicional, casi siempre a favor de los soportes de hierro o latón, crea un juego de contrastes entre las pinceladas gestuales, la fragilidad del papel y el peso de las estructuras metálicas.

En Mal-me-quer, Ferreira continúa explorando el formato de archivo utilizando toda el área de la galería como un contenedor de dibujos que los visitantes podrán hojear. El artista presentará varias pinturas de gran formato basadas en bocetos y obras que en algún momento han sido rechazadas o sin desarrollar, sostenidas por estructuras de hierro que están suspendidas del techo de la galería. Las obras permiten el espacio suficiente para que los espectadores naveguen entre un dibujo y el siguiente. La instalación se apodera de su entorno, retomando así la investigación del artista sobre plantas parásitas (cuyo punto de partida fue en 2019 con la exposición Parasita, en Travessa da Ermida), que de una u otra forma han prosperado en la imaginación y la historia personal del artista.